Cambiar el paradigma del docente. Pasar del monopolio del saber al reconocimiento de las propias limitaciones y explorar la profesionalización de la didáctica (animar, orientar, motivar,....)
Asumir y aceptar con alegría que el alumnado debe tener un rol activo en el proceso de enseñanza-aprendizaje
Transitar del rol de empleado al rol del profesional
Construir y cuidar la propia identidad digital
Crear, mantener, su propio PLE (Entorno Personal de Aprendizaje)
Cambiar paradigma de la evaluación. Pasa de herramienta de control a fuente de información para alimentar la mejora continua. Hacerla bidireccional
Recuperar el valor del error como oportunidad de aprendizaje y mejora.